Con el propósito de que los pueblos indígenas optimicen sus habilidades de gestión, finanzas personales y que tengan una oportunidad de crecimiento, de expansión de la actividad económica donde puedan comercializar sus productos, profesionalizarse e incluirse en el sistema financiero, Nacional Financiera (Nafin) ha puesto en marcha un programa de capacitación en lenguas originarias.

El reto de inclusión financiera se hace aún más difícil en estos pueblos indígenas teniendo en cuenta que estas comunidades sufren un doble aislamiento: por el idioma ya que se comunican en sus dialectos tradicionales y porque viven  alejadas y aisladas.

La inclusión financiera, es una herramienta crucial para reducir la pobreza y promover la prosperidad compartida y ha sido uno de los principales desafíos mexicanos de cara al desarrollo.

De acuerdo con la Política Nacional de Inclusión Financiera, en México la población que habita en localidades rurales presenta un rezago importante de tenencia de productos financieros con respecto a la situación de la población en localidades urbanas. 

En las localidades urbanas, aproximadamente el 50 por de las personas adultas dispone de una cuenta de ahorro, en contraste de las localidades rurales, donde este producto disminuye al 25 por ciento de las personas adultas.

Nafin, banca de desarrollo, informó que a través de una serie de cursos en Maya y Tzotzil, artesanos y productores de comunidades indígenas de Campeche, Chiapas, Yucatán y Quintana Roo, han sido formadas a fin de crear mejores condiciones de prosperidad para sus familias.

Los cursos incluyen temas como: Pasos para iniciar con mi negocio (emprendimiento), mi negocio sirve a mi comunidad (servicio al cliente), vender más y con mejor ganancia, el control financiero del negocio es útil  y sencillo (flujo de efectivo), promoción y venta a través de redes sociales.

Las personas que han recibido esta capacitación ahora cuentan con conocimientos que les ayudarán a saber cómo administrar sus recursos, asignar un precio justo a su producto, tener conocimientos mínimos financieros; para que puedan formar negocios exitosos, que crezcan orgánicamente y que cuando accedan a apoyos financieros, éstos sean una solución y no un problema.

La capacitación no se limita a lengua Maya y Tzotzil; próximamente se impartirán cursos en Chontal, Otomí, Purépecha y Zapoteco.

A la fecha se han impartido 47 cursos con una asistencia de más de 700 personas artesanas, la mayoría mujeres, en Calkiní, Campeche; Zinacantan, Chiapas; Mayapán, Tixmehuac, Chemax, Cantamayec, Yucatán; en la comunidad del Señor en Felipe Carrillo Puerto, en la Comunidad X-Pichil en Felipe Carrillo Puerto y José María Morelos, Quintana Roo.

Con estas acciones, Nafin cumple con su mandato de establecer programas de financiamiento para apoyar actividades económicas que propicien la creación de empleos, en las empresas u organizaciones indígenas.