Los bancos globales enfrentarán condiciones operativas más difíciles en 2024 debido a un crecimiento económico por debajo de la tendencia y a tasas de interés elevadas durante todo el año, incluso cuando los principales bancos centrales comiencen a recortar tasas, advirtió la firma financiera internacional Moody´s.
Sin embargo, la perspectiva 2024 para bancos en América Latina es estable, pero la inestabilidad política persiste, por las elecciones en México y más recientemente en Argentina y Guatemala.
La calificadora de valores consideró, que las tensiones sociales podrían continuar ante el debilitamiento de la actividad económica, lo que frenará el apetito de los inversionistas en la región, especialmente en Perú, Colombia y Chile.
Moody´s anticipa un bajo crecimiento económico, a pesar de las expectativas de una aceleración relativa hasta 2024. “La excepción es México, donde el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) está por encima de los niveles históricos gracias al nearshoring, un proceso que también beneficiará a Centroamérica”.
En Brasil y Colombia, donde las carteras de préstamos están más expuestas a consumidores y Pymes, los bancos mantendrán un enfoque conservador del crédito y se centrarán en préstamos garantizados.
La eliminación gradual de los programas de apoyo gubernamental en Perú y Panamá se traducirá en un aumento de la cartera vencida, pero en su mayoría se mantienen buenas provisiones.
El uso intensivo del dólar estadounidense en Uruguay, Perú, Panamá y América Central seguirá exponiendo a los bancos a mayores riesgos y expondrá a esas economías al ciclo monetario de Estados Unidos.
Una buena rentabilidad les permitirá a los bancos cumplir con los crecientes requerimientos regulatorios relacionados con la adopción de Basilea III en Perú y Chile, mientras que la capacidad total de absorción de pérdidas en México garantizará la absorción de pérdidas a través de amplios volúmenes de instrumentos híbridos.
El análisis de Moddy´s, señaló que la necesidad de recibir apoyo del gobierno disminuirá a medida que los bancos de la región acumulen instrumentos híbridos para la absorción de pérdidas.
“La perspectiva de Moody’s para los bancos globales en 2024 es negativa, ya que el endurecimiento de las políticas monetarias de los bancos centrales se ha traducido en un menor crecimiento del producto interno bruto.
“La baja liquidez y capacidad de pago reducirán la calidad de la cartera y generarán un mayor riesgo de activos.
“La rentabilidad podría disminuir debido a mayores costos de financiamiento, menor crecimiento de los préstamos y acumulación de reservas.
“Será más difícil obtener financiamiento y liquidez, aunque la capitalización se mantendrá estable y se beneficiará tanto de la generación orgánica de capital como del crecimiento moderado de los préstamos, a medida que algunos de los principales bancos de Estados Unidos acumulen capital”, señaló Felipe Carvallo, Vice President – Senior Credit Officer at Moody’s Investors Service.