Atender nuestras necesidades emocionales, físicas y mentales, así como administrar nuestro hogar y finanzas es fundamental en la ecuación del autocuidado, consideró Juan Luis Ordaz, director de Educación Financiera Citibanamex.
Encargarnos de nuestro propio bienestar suele malinterpretarse como egoísta, pero es más afín al dicho “marea que sube, eleva todos los barcos”. Cuando una persona es capaz de priorizar y satisfacer primero sus necesidades, le resulta más fácil dedicar su abundancia de energía, concentración y tiempo en apoyar también a los demás.
El experto en educación financiera nos comparte algunas recomendaciones para mantener tu bienestar salud y cuidado para tu bienestar no sólo en el ámbito financiero. ¿Ya tienes un plan de autocuidado integral?
El bienestar financiero, empieza por atender una de las mayores fuentes de tensión para todo el mundo: las finanzas. Cualquier decisión de dinero pensada para aumentar ingresos, pagar deudas, incrementar o proteger tu patrimonio es una forma de autocuidado.
Al crear cimientos financieros sólidos se pueden evitar sentimientos de estrés y preocupación que salen a flote cuando no podemos equilibrar nuestras finanzas.
Conoce (y aumenta) tu valor neto, el valor neto es una medición exacta de tu capital. Puedes calcularlo si restas tus pasivos (lo que debes) de tus activos (lo que tienes). Ya que tengas esta cifra, calcúlala cada trimestre o semestre.
Al ver como aumenta o disminuye esta cifra te ayudará a determinar tus siguientes pasos financieros.
Protege tus datos, tu computadora y tus dispositivos móviles albergan y ofrecen acceso a mucha de tu información personal y confidencial. Comprométete a proteger tu perfil en línea cambiando tu contraseña cada cierto tiempo para garantizar tu seguridad.
Puedes utilizar de contraseña tus metas, así serán un recordatorio de lo que quieres lograr.
Solicita tu historial crediticio, el informe de tu historial crediticio es el compilado de tu manejo de crédito y pago de deudas. Incluye cuántos créditos has tenido y cómo pagas tus cuentas: a tiempo, parcialmente o si has dejado de pagar.
Un elemento del autocuidado financiero es verificar la información o rectificar datos que no son reales. Esto es clave porque bancos, vendedores, posibles contratantes y arrendadores pueden revisar este informe y puntuación de crédito para evaluar si eres sujeto de futuros créditos.
Conexión con cuerpo, mente y hogar, nuestra salud física y mental trabajan juntas para crear alineación y equilibrio en nuestra vida. Y cuando del hogar se trata, piensa en tu espacio más allá de la mera función para crear una reflexión de cómo vives.
Aquí te proponemos algunas maneras fáciles de garantizar que tu plan de autocuidado no descuide la mente, el cuerpo y un espacio vital que nutra el ser.
Vitamínate al aire libre, no es ningún secreto que amarrarse el calzado deportivo para una caminata de 30 minutos al aire libre no cuesta nada y es una manera sencilla de abrirle las puertas a una vida sana.
Aprovecha el Internet, aumentar tus fortalezas, explorar tu creatividad o aprender algo nuevo puede aumentar tu confianza y cambiar tu visión del mundo. Las mejores universidades ofrecen acceso a cientos de cátedras y clases.
Además, se ofrecen tantas clases en línea a buen precio o incluso gratis, que se ha cambiado el panorama de cómo mejorar las habilidades profesionales o cambiar de profesión.
También puedes girar el globo terráqueo y emprender un viaje virtual a parques nacionales, museos, casas históricas y teatros de categoría mundial… y gratis, desde la comodidad del sofá.
Descongestiona tus armarios, limpiar los armarios también nos permite devolver lo prestado a sus dueños, crear paquetes de cuidado improvisados para amistades, donar o ganarnos un dinero extra al vender en plataformas populares entre particulares.
Estos actos profundizan los lazos sociales, fortalecen la participación cívica y mejoran nuestros presupuestos.
Recuerda que, al priorizar el autocuidado, hacemos espacio para la felicidad, prosperidad y salud en nuestras vidas.
Además, así podemos inspirar a los demás a hacer lo mismo sobre todo cuando es visible que las prácticas de autocuidado son responsables de un cambio positivo en nosotros mismos que los demás pueden notar.