En febrero de 2024 ingresaron al país 4 mil 510 millones de dólares por concepto de remesas familiares enviadas por los trabajadores connacionales en el extranjero, informó el Banco de México (Banxico).
Esto representa un incremento de 3.7 por ciento en comparación al mismo mes del año anterior con lo que las remesas a México logran un nuevo crecimiento histórico anualizado.
Las remesas acumuladas en los últimos 12 meses (marzo 2023 a febrero 2024) se ubicaron en 63 mil 621.79 millones de dólares, sumando 46 meses consecutivos de crecimiento anual y alcanzando un nuevo máximo en registro.
Los informes del Banxico detallan, que se contabilizaron 11.7 millones de operaciones para el envío de estos recursos a México, de las cuales 99.1 por ciento fue a través de transferencias electrónicas, y la remesa promedio fue de 384 dólares.
Sin embargo, los analistas advierten que el flujo de remesas se ha ido desacelerando por lo que se debe seguir monitoreando.
Los especialistas explicaron que, la desaceleración del flujo de remesas es consistente con un enfriamiento gradual del empleo en Estados Unidos al comienzo del año y un menor crecimiento del ingreso.
De hecho, en febrero el ingreso real disponible en Estados Unidos se contrajo 0.09 por ciento mensual, siendo la primera contracción desde septiembre del 2023 y la mayor desde junio del 2022, luego de que en enero se observó un estancamiento
Los especialistas del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA), recordaron que desde mayo de 2020, poco después del inicio de la pandemia, el flujo de remesas a México promediaba fuertes crecimientos a niveles de más de dos dígitos.
Entre mayo y diciembre de 2020, las remesas al país se incrementaron en promedio 11.4 por ciento a tasa anual, debido en parte a los paquetes de estímulos fiscales y de transferencias directas a los hogares en Estados Unidos, incluyendo a cerca de 7 millones de migrantes mexicanos con ciudadanía o residencia permanente en ese país.
Para 2021, las remesas tuvieron su mejor desempeño de los últimos 15 años, crecieron 25.9 por ciento.
Esto se explica principalmente por la rápida recuperación de la economía estadounidense que llevó a una “escasez relativa” de la mano de obra nativa que fue cubierta por trabajadores migrantes tanto documentados como indocumentados.
Esta condición impulsó el flujo migratorio de migrantes mexicanos en ese año y en años subsecuentes, lo cual contribuyó para que en 2022 las remesas a México aumentarán 12.1 por ciento y entre enero y octubre de 2023 crecieran en promedio 8.9 por ciento.
Pero entre noviembre de 2023 y febrero de 2024, las remesas tuvieron muy bajos incrementos, inclusive con el riesgo de romper la actual racha de aumentos.
En noviembre de 2023 se tuvo un aumento de 1.2 por ciento, para el mes de diciembre fue de 2.2, durante el primer mes de 2024 se incrementaron en 3.1, y el último dato, que corresponde al mes de febrero, fue de 3.7 por ciento.
Así, en estos últimos 4 meses las remesas a México han promediado aumentos de 2.6 por ciento a tasa anual.
Gabriela Siller, economista en Jefe de Banco Base destacó que para la población de México, lo más relevante es la variación del poder adquisitivo de las remesas, para lo que además del efecto del tipo de cambio, se debe considerar el efecto de la inflación en México.
“Haciendo este cálculo, en enero del 2024 el poder adquisitivo de las remesas registró una caída de 8.69 por ciento respecto al mismo mes del 2023, acumulando 16 meses consecutivos de contracciones anuales y siendo el mayor periodo de caídas en registro”.
La caída del poder adquisitivo de las remesas tiene un efecto negativo sobre el crecimiento económico, pues afecta directamente el ingreso de los hogares y el consumo privado, indicó.